Señoría es un tratamiento de respeto que se aplica a altas dignidades como jueces, diputados y senadores. Veamos un par de ejemplos para empezar:
(1) “Casi me ofende, señoría“, le llegó a replicar la infanta al juez José Castro cuando este le preguntó si podía haber sido utilizada como “escudo fiscal” ante el ministerio de Hacienda [El País (España), 20-2-2014].
(2) Lo único que se oye en la grabación es al presidente de la Cámara, Pío García Escudero, pidiendo a sus señorías que guarden silencio [Sandra Mir y Gabriel Cruz: ¡Mamá, quiero ser político!].
En el ejemplo (1) el tratamiento se está utilizando para dirigirse a un juez durante un interrogatorio. En (2) se refiere a los senadores españoles. El ejemplo (2) nos viene bien además para darnos cuenta de que esta forma de respeto suele ir precedida del posesivo su. En la lengua antigua era frecuente también la combinación vuestra señoría. Hoy ya ha caído en desuso, pero todavía nos podemos topar con ella de vez en cuando.
La principal dificultad de uso está en la concordancia de género, que es un poco especial. Compara los ejemplos (3) y (4):
(3) Princesas, condes, marquesas, altísimas señorías… el alcalde quiere saludarles a todos y dirá alguna cosa… [Orlando Rossardi: La visita].
(4) Mientras esto ocurre, sus señorías estaban enfrascados en el Parlamento en una ardua discusión a propósito del tráfico de influencias [Jesús Cacho: Asalto al poder. La revolución de Mario Conde].
Señoría es un nombre de género femenino. Eso se nota perfectamente en (3), donde encontramos un adjetivo, altísimas, que concuerda en femenino con él. ¿Hasta aquí todo bien? Pues vamos a complicarlo. Fíjate ahora en el ejemplo (4). El adjetivo enfrascados está en masculino. El motivo es que su relación con señorías está mediada por el verbo estar: es un atributo. Para decirlo de una forma poco científica, pero que se pueda entender, señoría se comporta como femenino con lo que está cerca, pero se olvida de ese género con lo que está lejos. De todas formas, puedes encontrar una explicación más detallada en el artículo sobre la concordancia de señoría, alteza, etc.
Esta fórmula de tratamiento admite las siguientes abreviaturas:
S.ª (señoría)
S. S. (su señoría)
V. S. (vuestra señoría)
V. S. I. (vuestra señoría ilustrísima)
Los correspondientes plurales son estos:
S.as (señorías)
SS. SS. (sus señorías)
VV. SS. (vuestras señorías)
VV. SS. II. (vuestras señorías ilustrísimas)
Date cuenta de que las abreviaturas de arriba se escriben con mayúscula, pero la forma desarrollada va íntegramente en minúsculas. Esto es así porque señoría se escribe en minúscula como todos los tratamientos honoríficos.
En fin, espero que esta explicación les haya sido útil a sus señorías.
Nota: Los ejemplos (3) y (4) están tomados del CREA (Real Academia Española: Banco de datos (CREA) [en línea]. Corpus de referencia del español actual. <http://www.rae.es> [octubre de 2015]).