Una vieja regla de ortografía dice que las palabras terminadas en -bilidad se escriben con be, por ejemplo:
(1) habilidad
(2) debilidad
(3) contabilidad
(4) inconmensurabilidad
Hay dos excepciones:
(5) movilidad
(6) civilidad
Bueno, en realidad existe alguna excepción más porque a las anteriores hay que sumarles sus derivados, como inmovilidad e incivilidad; pero con acordarse de (5) y (6) es suficiente.
El caso de movilidad es curioso porque viene del latín mobilitas, que se escribía con be. Otras palabras de la familia se escriben con be, como mueble o mobiliario. Y si nos fijamos en otras lenguas europeas, comprobaremos que se mantiene la be latina:
(7) mobility (inglés)
(8) mobilité (francés)
(9) Mobilität (alemán)
(10) mobilność (polaco)
La grafía con uve, en este caso concreto, no solo complica la escritura del español, sino que nos aparta de otras lenguas de cultura.
En fin, curiosidades de la ortografía de nuestra lengua…