Lo normal en español es que los apellidos no cambien de forma en plural:
(1) Los Martínez
(2) Los Ordovás
(3) Los Barragán
(4) Los Cabrera
Es más, los que terminan en -s o en -z nunca cambian por más que queramos. Si eres hablante nativo, prueba a añadirles una terminación de plural a los ejemplos (1) y (2) y verás cómo la rechazan.
Los demás, en general, pueden adoptar la forma de plural, pero no es ni lo más habitual ni lo más recomendable:
(5) Los Barraganes
(6) Los Cabreras
La opción más segura es mantener la forma del singular para el plural, tal como se muestra en los ejemplos (3) y (4).
Sí es normal el plural cuando no nos referimos a los miembros de una familia, sino simplemente a personas que comparten un mismo nombre, por ejemplo:
(7) ¿Cuántos Garcías habrá en España?
Los nombres de dinastías se comportan de manera especial. Lo más normal es que se mantengan invariables en plural, como ocurre con los otros apellidos:
(8) Los Saboya
(9) Los Braganza
Sin embargo, para ciertas familias sí que existe la costumbre de formar el plural:
(10) Los Borbones
(11) Los Austrias
(12) Los Capetos
No debemos considerar esta distinción como absoluta. Podemos encontrarnos textos que hablen de los Braganzas o los Borbón, lo cual es correcto y aceptable (por más que no sean estas las opciones más frecuentes).