El uso de la coma con la conjunción si y sus hermanas presenta paralelismos con lo que ya expliqué para el caso de aunque. No obstante, también cuenta con algunas particularidades.
En primer lugar, me voy a ocupar del si condicional, que es el más típico y el más frecuente. Este expresa la condición que se tiene que cumplir para que algo se haga realidad.
Además examinaremos algún otro valor que puede adquirir la conjunción si.
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Si condicional
Como norma general, no vas a escribir coma delante de una oración subordinada condicional que va introducida por si:
(1) Me iré a vivir a Marbella si me toca la lotería.
Este es el comportamiento normal cuando la subordinada aparece en posición final del enunciado. La cosa cambia cuando le das la vuelta a la tortilla, es decir, cuando la oración subordinada adelanta su posición:
(2) Si me toca la lotería, me iré a vivir a Marbella.
Ahora necesito una coma para que mi lector perciba la frontera entre la subordinada y la principal. No obstante, si la secuencia en su conjunto es muy breve, puedes suprimir esa coma (siempre que eso no dé lugar a confusiones, por supuesto):
(3) Si bebes no conduzcas.
A veces, la subordinada con si se incrusta en el interior de la principal. En ese caso, hay que aislarla con comas para que se sepa quién es quién:
(4) Yo, si me toca la lotería, me iré a vivir a Marbella.
La oración principal es Yo me iré a vivir a Marbella. La subordinada con si se ha incrustado en su interior. Las comas le muestran a tu lector que esa secuencia se sitúa en una posición que no es la habitual.
También existen oraciones condicionales que se refieren al verbo decir que está implícito en todo enunciado:
(5) Eso es una grosería, si se me permite.
La estructura que hay detrás del ejemplo anterior es la siguiente:
(6) Si se me permite, te digo que eso es una grosería.
Eso es lo que justifica la coma del ejemplo (5). Ya hemos visto en lecciones anteriores que este tipo de construcciones se señala con coma.
Si no
Dentro de las oraciones subordinadas con si, merece mención aparte la secuencia si no. Lo que tienes aquí es la combinación de un si condicional con la negación. Es importante que puntúes bien para evitar confusiones. Veamos un ejemplo:
(7) Si me toca la lotería, me iré a Marbella; si no, tengo dinero suficiente para seguir viviendo donde estoy.
Haz una prueba. En el ejemplo anterior, elimina la coma que aparece después de si no. Lee el resultado. Sin esa coma, nos perdemos porque parece que estamos diciendo: «Si no tengo dinero…». El origen de la dificultad está en que en este caso (y en muchos otros) si no es una expresión abreviada. El ejemplo tiene esta estructura:
(8) Si me toca la lotería, haré esto; si no [me toca la lotería], esta es la alternativa.
Esta estructura te explica también por qué aparece un punto y coma antes de si no. Este marca la frontera entre dos oraciones diferentes. Mira este otro ejemplo, en que, simplemente, aíslo si no entre comas:
(9) Si me toca la lotería, seré rico y, si no, seguiré siendo pobre.
Esas comas aportan claridad al lector. Por eso, como medida preventiva, la Ortografía de la lengua española recomienda que aísles si no con comas en casos como estos, incluso cuando no haya lugar a confusión. Eso sí, ten en cuenta que esto rige solamente para estas expresiones abreviadas. El ejemplo siguiente es harina de otro costal:
(10) Si no te gusta el caviar, déjalo en el plato.
Aquí sería un error escribir coma después de si no porque no se ha abreviado nada. La negación no afecta al verbo gustar. Por tanto, no podemos separar con un signo de puntuación lo que está íntimamente unido.
Una dificultad adicional que afecta a si no es que muchas personas confunden esta secuencia con la conjunción sino. Ya vimos en una lección anterior que sino (en una palabra) es una de las hermanas de pero.
No hay un truco fácil para diferenciar lo uno de lo otro de manera mecánica. El mejor consejo que te puedo dar es que te fijes en la pronunciación. La secuencia en dos palabras (si no) se pronuncia [sinó]. En cambio, la hermana de pero suena [sino]. En primer lugar, vamos a examinar un ejemplo con si no:
(11) Ojalá me toque la lotería; si no, tendré que trabajar.
El ejemplo que acabas de leer contiene la versión en dos palabras. Cuando lo pronuncio, suena así:
(12) [ojalá metóke lalotería | sinó tendré ketrabajár]
Te presento ahora un ejemplo con sino (hermana de pero):
(13) Mi suegra no es pobre sino rica.
Observa la diferencia de pronunciación:
(14) [misuégra nó és póbre sinorríka]
La versión en una palabra se pronuncia [sino]. Esto quiere decir que carece de golpe de voz propio en la lengua hablada. Tiene que apoyarse en la palabra siguiente para que lo podamos pronunciar. En este caso, se apoya en el adjetivo rica, que es el que viene a continuación.
Las hermanas de si (con valor condicional)
La conjunción si tiene sus hermanas condicionales, como no podía ser menos. Te muestro algunas:
- como,
- en caso de (que),
- siempre y cuando,
- de + infinitivo.
Cuando tienen valor condicional, todas estas palabras y expresiones se comportan igual que si por lo que respecta al uso de la coma.
En este apartado volvemos a toparnos con como. Ya hemos dicho que esta palabra acumula múltiples valores: es un todoterreno lingüístico. A veces, adquiere un significado condicional, sobre todo, en la lengua coloquial:
(15) Como me toque la lotería, me voy a vivir a Marbella.
El como del ejemplo anterior equivale a si. De hecho, puedo sustituirlo por esta última conjunción. Solo necesitaré un leve retoque en el modo del verbo, que se traslada del subjuntivo al indicativo:
(16) Si me toca la lotería, me voy a vivir a Marbella.
Te voy a mostrar también un ejemplo en que de + infinitivo adquiere valor condicional:
(17) De tocarme la lotería, me iría a vivir a Marbella.
Cuando las hermanas de si aparecen en posición final, no se escribe coma delante (es el mismo comportamiento que hemos visto para si):
(18) Me iré a vivir a Marbella siempre y cuando me toque la lotería.
No obstante, se admite coma delante de si y sus hermanas cuando la información se presenta como un inciso. Como ya hemos visto en apartados anteriores, en ese uso la coma puede alternar con los paréntesis. Esta es una opción que presenta un alto grado de subjetividad. Por eso mismo, resulta complicado reducirla a reglas que permitan determinar exactamente cuándo resulta aceptable.
Otros valores de si
Los usos más típicos de si son los condicionales. No obstante, esta palabra también aparece en otras construcciones. Existe un si que introduce oraciones interrogativas indirectas, por ejemplo:
(19) No sé si me habrá tocado la lotería.
Ese si no expresa ninguna condición. Que me toque la lotería o me deje de tocar es independiente de que yo lo sepa. Lo que se encierra ahí es una pregunta. Esta va a dar la cara en cuanto sustituyas si por una cosa:
(20) No sé una cosa: ¿me habrá tocado la lotería?
No se escribe coma delante del si de las interrogativas indirectas. ¿Por qué? Porque esa oración subordinada funciona como complemento del verbo. El esquema que subyace a nuestro ejemplo anterior es este:
(21) alguien no sabe algo
Esa variable algo se puede convertir en el habla en una diversidad de elementos: algunas cosas, ciertos detalles interesantes, si me habrá tocado la lotería, quién mató a Kennedy, etc. Algunos de estos posibles elementos son más sencillos y otros más complejos. Aun así, todos ellos funcionan como complemento del verbo y por eso no los vamos a separar con coma.
Además hay otro si que parece condicional a primera vista, pero que no lo es. A veces, esta palabra forma perífrasis enfáticas, como en este ejemplo:
(22) Si algo caracteriza a mi suegra es su gran corazón.
Esta estructura puede confundirse fácilmente con una condición. Sin embargo, al observarla con detenimiento, te darás cuenta de que ahí no se condiciona nada. Es simplemente una forma más elaborada de afirmar que mi suegra se caracteriza por su gran corazón. Por eso, en estos casos no se escribe coma. En realidad, lo que tienes ahí es una forma más elaborada de decir esto otro:
(23) Lo que caracteriza a mi suegra es su gran corazón.
Todavía encontrarás otro si en el apartado dedicado a las construcciones consecutivas. Prefiero presentarlo allí porque de esa forma se entiende mejor el comportamiento de la coma en esas estructuras. Además, es un caso un tanto periférico.
Ejercicio
¿Sabes utilizar correctamente la coma? Vamos a comprobar qué tal se te da en algunos casos especiales.