Las formas
El pronombre de tercera persona es él. Se refiere a la persona de quien se habla, que no es ni la primera ni la segunda. Este pronombre diferencia tres géneros en el singular:
- masculino: él
- femenino: ella
- neutro: ello
En el plural cuenta solamente con dos formas:
- masculino: ellos
- femenino: ellas
El neutro carece de plural.
El origen histórico
Nuestro actual pronombre de tercera persona procede de un demostrativo latino que significaba ‘aquel, aquella, aquello’:
- masculino: ille
- femenino: illa
- neutro: illud
Este demostrativo latino es el mismo que dio lugar al artículo determinado el, la e incluso a la forma neutra lo que encuentras en combinaciones como lo hermoso, lo justo, etc. Eso explica la semejanza entre el pronombre él y el artículo el. Te muestro la evolución histórica:
(1) ille > ele > el/él
Evitemos confusiones
Para evitar confusiones, la ortografía diferencia el pronombre y el artículo con una tilde diacrítica:
(2) Él ama el chocolate.
La tilde se le asigna al pronombre personal porque es tónico. El ejemplo anterior se pronuncia así:
(3) [él áma elchokoláte]
Como ves, la situación a este respecto es paralela a la que constatábamos para el caso del pronombre tú y el posesivo tu.
A quién se refieren
Cuando funcionan como sujeto, las formas él y ella siempre se refieren a personas o animales, nunca a cosas, por ejemplo:
(4) Leandra es una mujer decidida. Ella sabe lo que quiere.
El ejemplo siguiente no funciona porque intento apuntar con el pronombre ella a un objeto inanimado:
(5) He comprado una silla de estilo Luis XV. Ella completa mi colección de antigüedades.
Lo anterior resulta raro. Quizás sería aceptable en un estilo literario un tanto particular o si estuviéramos personificando la silla. Normalmente utilizamos en su lugar el demostrativo:
(6) He comprado una silla de estilo Luis XV. Esta completa mi colección de antigüedades.
La cosa cambia cuando el pronombre se combina con una preposición, pero eso es materia para otro artículo.
Un pronombre marginado
El neutro ello presenta algunas particularidades. Para empezar, el hecho de que exista una forma específica para el género neutro constituye una anomalía dentro del conjunto de los pronombres personales. En el español actual, los dos géneros que realmente tienen rendimiento son el masculino y el femenino. El neutro ocupa una posición marginal en el sistema. Sus manifestaciones son los restos del naufragio del género neutro latino.
Teniendo en cuenta lo anterior, no te sorprenderá descubrir que el pronombre ello posee escaso uso como sujeto en la lengua actual. Sus posibilidades de utilización se han ido reduciendo a lo largo de los siglos. Esto es una indicación más de su carácter marginal y residual.
Hoy día, casi siempre, su lugar como sujeto lo ocupan los demostrativos neutros esto o eso, por ejemplo:
(7) Completa el ejercicio siguiente. Eso te ayudará a consolidar lo aprendido.
En el ejemplo, el antecedente de eso lo constituye la oración Completa el ejercicio siguiente. En la actualidad, no utilizaríamos ello para esa función, salvo quizás en la lengua más culta y literaria.
No obstante, sí se emplea la expresión todo ello para referirse a una enumeración completa de sustantivos que designan cosas.
(8) Por la carretera circulaban coches, camiones, motos, autobuses… Todo ello llamaba poderosamente la atención de la criatura.
En el ejemplo, todo ello se refiere a los coches, camiones, motos y autobuses considerados en conjunto. Fíjate en que todo ello se mantiene en singular aunque se refiere a una pluralidad de elementos. Ya lo he dicho antes: el pronombre neutro carece de plural. ¿Sería posible utilizar todos ellos? Sí, pero cambiaría el sentido:
(9) Por la carretera circulaban coches, camiones, motos, autobuses… Todos ellos llamaban poderosamente la atención de la criatura.
Ahora, lo que llama la atención no es el conjunto de vehículos en sí. Lo que captura la atención de la criatura es cada uno de los vehículos individuales: se va fijando en cada coche, cada camión, cada moto… En este caso, la oposición entre singular y plural sirve para cambiar el foco. Además, ten en cuenta que la expresión todos ellos es de género masculino (insisto en que el neutro carece de plural).
El pronombre ello tiene más usos cuando se combina con preposición. Esa cuestión merece que la tratemos aparte.