Como regla general, los monosílabos no se acentúan. Se escribe, por tanto, sol, ron, doy, fui, guie, fe, Ruiz, Luis, Sainz, etc.
La excepción son los casos de tilde diacrítica como, por ejemplo, dé (del verbo dar), mí (pronombre personal), etc.
Cuando concurren dos o más vocales, no siempre es fácil decidir si una palabra es monosilábica (por ejemplo, vio) o no (veo). Para ello, necesitas entender las reglas que determinan qué es un diptongo ortográfico, qué es un triptongo ortográfico y qué es un hiato ortográfico.
Es importante recordar que se consideran monosílabos a efectos ortográficos palabras como guion, guie, hui, fie, ion, truhan, lio, riais, etc. Si con las normas de acentuación anteriores se desaconsejaba tildarlas, ahora el ponerles un acento se considera falta de ortografía. Tienes una explicación más detallada de este caso particular en Por qué no se acentúa ‘guion’.
Hay que tener cuidado para no caer en ultracorrección ortográfica. Quien se siente inseguro con los acentos tiende a ponerlos donde no debe. El caso más famoso es probablemente ti, que como todo el mundo sabe se escribe sin tilde. Un lector y amigo me decía también hace poco en un comentario que le duelen los ojos de ver escrito fe acentuado.
Tampoco se realizan excepciones para la acentuación de los nombres propios de persona. Estos siguen obligatoriamente las reglas que rigen para cualquier otra palabra y, por tanto, nombres monosílabos como Ruiz, Luis y Sainz no reciben acento ortográfico.
¿Lo tienes claro? Pues haz un ejercicio. y después descárgate el resumen de todo el sistema de acentuación.
Eso sí, lo que no te puede faltar es mi manual de acentuación.
En realidad, la lógica detrás de la adopción de “guion” y del sostenimiento de la doble grafía por parte de la Academia tiene otro ingrediente importante. El razonamiento se basa en que existen dos maneras de pronunciar esa palabra: en algunas regiones se hace hiato, y en otras no. La regla para monosílabos es distinta de la de las agudas terminadas en “n”, así que no es fácil resolver qué hacer en estos casos, a no ser que se sancione incorrecta una de las dos pronunciaciones, lo que sería bastante arbitrario. La solución de la RAE tiene su lógica: si usted pronuncia “guion” monosílabo, escríbalo con sin tilde, y si lo pronuncia “gui-ón”, hágalo con ella.
(Es verdad que la RAE alienta el uso de la primera opción, en un esfuerzo por simplificar las cosas).
A mí la que más me duele es “pié” (por todas partes la veo)