Las palabras llanas, también conocidas como graves, son las que se pronuncian con un especial relieve en la penúltima sílaba, por ejemplo:
(1) arce, examen, virus, árbol, tórax, córner, yóquey
Como se puede ver por los ejemplos anteriores, solo algunas de ellas tienen además acento ortográfico o tilde. La regla general para esto es de tipo negativo:
Regla: se escriben con tilde las palabras llanas que no terminan en vocal, –n o -s.
Nos encontramos, por tanto, con el reverso de la regla de acentuación de las palabras agudas.
La regla anterior explica que de los ejemplos de (1) no se tilden arce (acaba en vocal), examen (acaba en -n) y virus (acaba en -s), mientras que sí requieren acento ortográfico árbol, tórax, córner y yóquey. En este último caso, que es la castellanización gráfica del inglés jockey, la tilde es obligatoria porque la -y es, a todos los efectos, una consonante desde el punto de vista ortográfico.
Existe una excepción. Si una palabra llana termina en un grupo de dos o más consonantes, entonces sí es obligatoria la tilde, por ejemplo:
(2) bíceps, referéndums, superávits, récord, récords
Hay que tener en cuenta, además, que en ciertos casos habrá que aplicar las reglas específicas de la tilde diacrítica. Puedes consultar estos casos siguiendo el enlace anterior.
Frente a la regla para el uso de la tilde que acabamos de exponer, hay otra con muchos adeptos que dice: En caso de duda, yo la pongo.
Puedes encontrar esta regla y todas las demás resumidas siguiendo el enlace. Te vendrá bien hacer un ejercicio.
Aunque lo mejor es que te descargues un completo manual de acentuación.